Nacimiento del Afijo Fuentes de la Alhambra 

El nombre del afijo surge por la unión de dos pensamientos. El primero hace referencia a la persona que me inculcó la afición por la caza, para mí un modo de vida desde antes de nacer. Esa persona no podía ser otra que Antonio el de los Fuentes, es decir, mi abuelo. El segundo pensamiento, como no, hace mención a mi tierra, Granada, plasmada su belleza en su monumento más emblemático, que es la Alhambra. Qué puedo yo decir de ella que no sepa todo el mundo; emplazaros a que si no la conocéis, vengáis a descubrirla. Seguro que no saldréis decepcionados.

Mi afijo pretende plasmar esa unión, la que surge del sentimiento y la belleza, en nuestros bracos alemanes. Quiero dar las gracias a quien me ha ayudado a hacer posible este afijo. Además de colaborador necesario, gran amigo y mejor persona: Alejandro Sánchez. A esos amigos que han confiado en mí y que han aguantado estoicamente mis charlas. Me refiero a Antonio, Silverio, José Miguel... Y cómo no, a mi mujer y a mi hijo, a quienes pido perdón por no dedicarles algunas veces el tiempo que se merecen.

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